Cómo equilibrar los videojuegos con otros pasatiempos e intereses
Sí, los videojuegos son geniales. Tan geniales, de hecho, que a veces pueden llegar a ser un poco absorbentes, especialmente para los niños pequeños que tal vez no entiendan el concepto de moderación.
Establecer límites de tiempo e implementar controles parentales en las consolas de juegos puede ayudar a hacer que el tiempo frente a las pantallas sea más positivo para los peques. Y aunque eso pueda ganarte la reputación de “malvado supervisor de la diversión”, es un paso necesario para mantener a los niños y las niñas seguros en línea.
Recuerda que una infancia integral requiere equilibrio. Por lo tanto, veamos las estrategias que puedes adoptar para fomentar un conjunto de intereses más diverso en tu peque. Comenzaremos por las actividades fuera de línea.
No estamos diciendo que tu niño o niña deba convertirse en un deportista olímpico en miniatura de la noche a la mañana, pero ten en cuenta que los deportes promueven la aptitud física, el trabajo en equipo y la disciplina. Además, la lectura fomenta las habilidades lingüísticas y estimula la imaginación, mientras que participar en artes y manualidades, como pintar un cuadro, hacer una pulsera o tocar un instrumento musical, fomenta la creatividad y la autoexpresión.
Y, hablando de creatividad, ¿por qué no explorar vías que puedan mejorar la experiencia de juego general de tu peque? Por ejemplo, podrías sugerirle que explore el diseño de videojuegos o que se exprese a través del arte de fans.
Otro enfoque para lograr un equilibrio entre el tiempo en Internet y fuera de línea es dar vida a los videojuegos con sets LEGO®.
Al llevar sus tramas, personajes y aventuras favoritos de la pantalla a las manos de tu joven jugador, inmediatamente desatarás su creatividad al involucrarlo en historias del mundo real. Además, la oportunidad de desafiar a amigos o familiares usando estos sets añade un aspecto social al juego fuera de línea.