Hábitos saludables relacionados con los videojuegos: consejos para papás y mamás
“¡Pero si casi ya completo este nivel!”.
¿Cuántas veces ha pronunciado tu peque o adolescente estas palabras (mientras se aferraba a su consola)?
Es suficiente con una estimación…
En la era digital actual, los videojuegos se han convertido en una parte fundamental de la vida de muchos niños y adolescentes. Y aunque pueden beneficiar a los menores de muchas maneras, desde el desarrollo cognitivo hasta la interacción social y la colaboración, sigue siendo importante que los padres y cuidadores establezcan límites de uso y fomenten hábitos de juego saludables.
Y entonces, ¿te gustaría jugar… un papel importante apoyando a tu joven jugador de videojuegos? Si es así, continuemos.
Investiga y averigua lo que le gusta
Un juego ha recibido reseñas muy favorables en el patio de juegos, ¿pero cuál es su clasificación?
Nos referimos a las categorías establecidas por la Entertainment Software Rating Board1, que están diseñadas para ayudar a los papás a seleccionar contenidos apropiados para la edad de los peques o adolescentes jugadores de videojuegos:
- Todos los públicos. El contenido es generalmente adecuado para todas las edades. Puede contener un mínimo de violencia en dibujos animados, de tipo suave o de fantasía y/o el uso infrecuente de lenguaje suave.
Mayores de 10 años. El contenido es generalmente adecuado para mayores de 10 años. Puede contener más violencia en dibujos animados, de tipo suave o de fantasía, y/o temas mínimamente sugerentes.
Adolescentes. El contenido es generalmente adecuado para mayores de 13 años. Puede contener violencia, temas sugerentes, humor grosero, un mínimo de sangre, apuestas simuladas y/o el uso infrecuente de lenguaje fuerte.
Para que sepas dónde buscar, las clasificaciones aparecen en los paquetes de los juegos físicos que se venden en las tiendas, en las descripciones en línea de los sitios donde se pueden descargar juegos y apps, en los anuncios de los juegos y en los sitios web donde se reseñan estos.
También es importante que investigues antes de comprar o descargar un juego. Lee opiniones, mira videos de la experiencia de juego y habla con otros papás para obtener información sobre el contenido del juego y su posible valor educativo.
Por último, ¿qué espera tu peque de un videojuego?
Solo hay una forma de averiguarlo…
Anímalo a expresar abiertamente sus intereses de juego. Esto no solo te ayudará a tomar decisiones con conocimiento de causa, sino que también reforzará las relaciones entre papá o mamá y niño o niña.
Fomenta el juego social y cooperativo
¡Haz que el tiempo frente a la pantalla sea sociable!
Los peques saben que los videojuegos en línea ofrecen una forma de conectar con los amigos. De hecho, una encuesta reciente reveló que el 50 % de los jóvenes de 13 a 17 años se comunican mediante videojuegos al menos una vez al día2.
Intenta fomentar el sentido de comunidad invitando a amigos y familiares a unirse a una partida multijugador. Este enfoque colaborativo y cooperativo puede mejorar el trabajo en equipo y la capacidad de comunicación. Para ser sinceros, somos tan fans de las aventuras de juego hombro con hombro que los videojuegos LEGO para PC y consolas están diseñados para el juego cooperativo a pantalla dividida.
Jugar juntos también puede llevarlos a conversar juntos. Así que, cuando se desconecten, ¿qué tal si inician una conversación sobre cuestiones de seguridad en Internet, como qué debe hacer tu peque si cree que ha encontrado información falsa en Internet?
Cuando tu niño o niña se aleje del sofá, haz que el tiempo frente a la pantalla sea más equilibrado ayudándole a participar en competencias y clubes de videojuegos locales. Los eventos de ese tipo favorecen la interacción y permiten a los jugadores hacer amigos que compartan sus intereses en el mundo real.
Por último, busca títulos diseñados para fomentar el trabajo en equipo y en los que el éxito radique en la capacidad del jugador para colaborar, comunicarse y cooperar eficazmente.
¿Te gusta el aspecto de esas habilidades para la vida? A nosotros también.